La memoria del exilio en 5 itinerarios gerundenses que debes conocer

El exilio republicano a causa de la Guerra Civil entre enero y febrero de 1939, que llevó a medio millón de personas a cruzar la frontera administrativa con Francia, en la Cataluña Norte, es uno de esos hechos de los que no hay que perder nunca la memoria. Ha sido sin duda uno de los acontecimientos que ha cincelado a base de sufrimiento el carácter de los perdedores de aquella guerra y de los que se vieron obligados a emprender el camino del exilio, en su mayoría catalanes, pero también gente proveniente de otros puntos de el Estado Español. El trazado de los caminos que conducían al estado vecino les llevaron a transitar por los pasos fronterizos del Pertús, de la Guingueta d’Ix, del coll d’Ares y de Cervera de la Marenda. La estación del año, en pleno invierno, aún añadió más dificultades al éxodo, con mucho frío y nieve y soportando la persecución del ejército franquista y sus bombardeos. Os proponemos la visita de 5 escenarios de las comarcas gerundenses para conocer un poco más a fondo, con profundidad y respeto, cómo fue y qué supuso el exilio republicano.

Una vista de Mas Perxés, refugio de intelectuales y políticos durante el éxodo. Foto: Empordà Turisme.

Agullana – la Jonquera – la Vajol

El portal web FemTurisme.cat propone realizar el itinerario L’exili a la Jonquera, la ruta dels republicans cap a França. Uno de los puntos por los que los exiliados atravesaron la frontera a pie fue en torno al municipio de La Jonquera y esta ruta recorre los lugares por donde pasaron. El itinerario propuesto comienza en el Museo Memorial del Exilio de La Jonquera, del que hablaremos más adelante. Después de realizar una visita, la comitiva de visitantes inscritos se dirigirá hacia Agullana y se pueden visitar diversas construcciones utilizadas por el gobierno republicano en su retirada. Una de éstas es la casa de Can Bech, en el pueblo, y a unos 5 kilómetros se encuentra el Mas Bech, donde se alojó el presidente del gobierno republicano Juan Negrín. Pero antes, a la salida de Agullana, hay que visitar el Mas Perxés, que durante el éxodo alojó a varios intelectuales catalanes (Carles Pi i Sunyer, Pompeu Fabra, Joan Oliver o Mercè Rodoreda), también el presidente de la Generalitat, Lluís Companys, con casi todos sus consejeros, algunos diputados del Parlament y el presidente del gobierno vasco, José Antonio Aguirre. La Vajol es el último punto del itinerario y la primera visita a realizar es la escultura que conmemora el exilio, un par de figuras en bronce que replican las figuras de dos exiliados, un hombre y una niña, ésta sin una pierna, que se esculpieron a partir de una fotografía que se ha convertido en icónica. El itinerario incluye visitas a Can Barris, donde se hospedó el presidente de la República Español, Manuel Azaña; a la mina canta o de Negrín; al coll de Lli y al coll de Manrella. Es una ruta que se hace por libre, necesitaréis ir en vehículo privado y en ocasiones hay que caminar un ratito. A vuestro aire.

Una vista del Pont Nou de Camprodon. Foto: Maria Geli / Pilar Planagumà. Archivo Imágenes PTCBG

Rutas de Molló y Camprodón

Ripollès Turisme propone dos rutas, la primera es la Ruta camí de l’exili. Ruta 1 Molló y la segunda es la llamada El camí de la retirada de Camprodón. El primer itinerario, que se hace a pie y de alta dificultad, no es circular, por lo que tendréis que disponer de algún tipo de transporte al final o volver a pie, aunque transcurra por el término municipal de Molló. Son unas 3 horas de camino señalizado y unos 9,5 kilómetros de distancia con un desnivel de 694 metros. En el término de Molló existían tres vías para cruzar la frontera, pero esta ruta se centra en la que va del camino de Espinavell al coll Pregon. El segundo itinerario sí que es circular, es de baja dificultad y está al alcance de quien decida recorrerlo. El paseo dura 1 hora en el que se cubre una distancia de 3,80 kilómetros y el desnivel acumulado supera apenas los 50 metros. No está señalizada, pero se puede descargar una aplicación (Natura Local) que os permitirá hacer la ruta guiada e interpretada, un recorrido por los principales lugares de Camprodón vinculados a momentos del exilio republicano que marcaron todo un pueblo.

Señalización del Camí de la Retirada a Molló. Foto: Carles Treviño. Archivo Imágenes PTCBG

Caminos del exilio en el Alt Empordà

El Memorial Democrático y el MUME han recogido en un díptico de la colección Espais de Memòria, titulado Retirada i camins de l’exili, una serie de itinerarios señalizados en las localidades y parajes del Alt Empordà que recorren los caminos que tuvieron mayor importancia en el momento del gran éxodo republicano. Están indicados los pasos fronterizos más importantes de los que hemos hablado, como La Jonquera o Portbou y también están incluidas otras vías secundarias, los pueblos situados en los macizos montañosos de la Albera y las Salines y los municipios que desarrollaron un papel relevante en la resistencia y evacuación de las últimas unidades militares republicanas. La señalización realizada hasta ahora incluye 17 pueblos con 27 puntos de información y un total de 30 señalizaciones. Los puntos señalizados están en: Agullana (pueblo, Mas Perxés y Coll de Manrella), Cantallops (Bell-lloc y pasos de montaña), Colera (puente ferroviario), Darnius (pueblo y Can Descals), Espolla (pueblo), Figueres (Plaza Ajuntament y Castell de St. Ferran), Garriguella (pueblo i aeródromo), La Jonquera (MUME y El Portús), La Vajol (pueblo, monumento al exilio, Mina Canta o de Negrín, Can Barris y coll de Lli), Llançà (Casa Marly, colonia infantil), Llers (pueblo antiguo, volado el 1939 por las tropas republicanas en retirada), Maçanet de Cabrenys (pueblo y pasos de montaña), Peralada (Castillo-convento de Peralada), Portbou (Oficina Turismo y Coll de Belitres), Roses (refugio antiaéreo), Rabós-Banyuls (Coll de Banyuls) y Vilajuïga (pueblo y Gran Hotel Central, colonia infantil).

El Museu de l’Exili y el Memorial Passatges

El Museu de l’Exili de la Jonquera es la visita imprescindible para conocer a fondo el fenómeno. Es un centro de interpretación que recuerda el exilio consecuencia de la Guerra Civil en España y Cataluña y sobre todo a los exiliados vencidos en la contienda, vinculada al ascenso de los totalitarismos en el resto de Europa. En su web, en el apartado de motivaciones, se explica claro cuál es el objetivo de este equipamiento, que se inauguró en diciembre del 2007: “El objetivo es dignificar a las víctimas y explicar a las nuevas generaciones nuestro pasado más inmediato y los costes históricos y humanos que tuvo la lucha por la democracia, para que no se repita. Y por eso es necesario un trabajo sistemático, constante y riguroso que aborde la tarea de recuperar todo este legado y que vele por su preservación y difusión entre un público lo más extenso posible.” Éste es uno de los museos más dinámicos de las comarcas de Girona, dispone de un completísimo programa cultural con un abanico de actividades impresionante y unos potentísimos servicios educativos. Otro lugar que debéis visitar es el Memorial Passatges, dedicado a Walter Benjamin, en Portbou, obra del artista israelí Dani Karavan. Passatges, que se inauguró el 15 de mayo de 1994 y fue promovido por la asociación AsKI de Bonn, mezcla la arquitectura y escultura y es de interés histórico, artístico y social, símbolo de cultura y paz, emblema de valores humanos y modelo de integración en el paisaje. Su visita representa una oportunidad para reflexionar en torno al valor social y humano del arte público, su encaje en la ciudad y en el paisaje y su conservación.

Imagen destacada: Una vista del Memorial Passatges, de Dani Karavan, en Portbou. Archivo Imágenes PTCBG.